Una de las maneras más efectivas de escalar un equipo de frontend manteniendo la cohesión en el diseño y maximizando la productividad es implementando un Design System o sistema de diseño.
Un Design System no es solo una biblioteca de componentes, sino un conjunto de reglas, restricciones y principios que guían la construcción de una interfaz de usuario.
Este sistema permite a los equipos de diseño y desarrollo colaborar de manera más eficiente, mantener la coherencia a lo largo de diferentes funciones y componentes, y acelerar el proceso de desarrollo.
El éxito de la implementación de un Design System depende en gran medida de su adopción y uso correcto por parte del equipo. Por eso, es esencial que todos los miembros del equipo estén involucrados y comprometidos con este proceso desde el principio. Para ello, es útil proporcionar formación y documentación claras sobre cómo utilizar el Design System y cómo contribuir a él.
Además, el Design System debe ser flexible y capaz de adaptarse a las necesidades cambiantes del equipo y del producto. Esto significa que debe ser fácil de actualizar y expandir, con una estructura que permita la adición de nuevos componentes y patrones de diseño de forma coherente y cohesiva.
Finalmente, un buen Design System debe ser fácil de usar e integrar en el flujo de trabajo del equipo. Esto puede lograrse proporcionando herramientas y automatizaciones que faciliten la implementación de los componentes del sistema en el código de la aplicación.
Suena todo muy bonito pero, ¿cómo lo plasmamos en la práctica?
Fases y herramientas a integrar en un Design System
Un sistema de diseño es un marco complejo que incorpora la colaboración de diferentes equipos, la implementación de diversas fases y la integración de una variedad de herramientas para funcionar eficazmente.
Es fundamental destacar que, en el panorama actual, la mayoría de las empresas optan por trabajar con librerías de componentes. En el ecosistema de React, algunas de las más utilizadas son ANTD y MUI, que han demostrado su eficacia y versatilidad.
En este contexto, los diseñadores tienen una responsabilidad primordial. Deben familiarizarse con la base de componentes de la librería que se va a utilizar. Este conocimiento aumenta la productividad del equipo de manera significativa, ya que estas librerías se basan en patrones de diseño, como Material UI, que ya cumplen con los requisitos de usabilidad y accesibilidad.
Los diseñadores llevarán a cabo su labor en Figma, una herramienta que les permite traducir los requerimientos de negocio en diseños visuales y prácticos.
Una vez que se ha completado la fase de diseño, el equipo de desarrollo entra en juego. Se analizarán conjuntamente los elementos que deben crearse o modificarse para implementar la nueva funcionalidad.
A continuación, se actualizarán los componentes en el repositorio que aloja nuestra librería de componentes. Este proceso incluye la realización de pruebas y tareas de diseño con StoryBook, una herramienta que facilita la visualización y la prueba de los componentes.
Finalmente, una vez publicada y actualizada la versión de la librería, estamos listos para implementar los nuevos componentes en nuestra aplicación. Este es el último paso en el proceso, que culmina con la introducción de mejoras y nuevas funcionalidades en nuestra plataforma.
En resumen, implementar un Design System en tu aplicación React es un proceso que requiere coordinación, colaboración y compromiso por parte de todo el equipo. No sólo mejora la coherencia y la productividad, sino que también permite una mayor flexibilidad y adaptabilidad a medida que tu producto y equipo evolucionan. Recuerda que las mejores prácticas, las herramientas adecuadas y un equipo comprometido son la clave para hacer realidad un Design System eficaz.